martes, 6 de enero de 2009

ROSCÓN DE REYES

Según manda la tradición, el día de Reyes hay que comer roscón. Muchas gracias a Mafalda de Mundorecetas por su espectacular receta. Sale de muerte.



Ingredientes:

ARRANQUE:

  • 50 g de harina de fuerza
  • 1 sobre de levadura seca de panadería
  • 100 ml de leche tibia o a temperatura ambiente

MASA: (Todos los ingredientes a temperatura ambiente)

  • 450 g de harina de fuerza (más o menos)
  • 100 m de leche
  • 2 cucharadas de agua de azahar (sólo una si gusta menos aromático)
  • 125 g de mantequilla
  • 25 g de manteca
  • 2 huevos y dos yemas
  • 120 g de azúcar
  • 1 cucharada de miel
  • 1 copita de ron (voluntario)
  • la piel de medio limón y media naranja (sólo la parte de color)
  • Una cucharadita rasa de sal

ADORNOS:

  • Azúcar remojada con una gotas de agua
  • Almendra molida
  • Frutas escarchadas
  • 1 huevo para pintar

ELABORACIÓN:

ARRANQUE:

En un bol pequeño, mezclar la harina y la levadura. Ir añadiendo la leche tibia y mezclar bien. Tapar con papel film y dejar reposar hasta que doble el volumen. Esta masa de arranque puede reposar cuanto tiempo se quiera, incluso toda la noche, pero si hay prisa, cuando se ve que ha doblado estará lista (una media hora a temperatura ambiente).

MASA:

Poner en el vaso el azúcar y glasear a velocidad 5-7-9. Bajar lo que haya quedado en las paredes, añadir las pieles de limón y naranja y repetir la operación hasta que esté bien triturado todo. Añadir al vaso la leche, la miel , el ron y el agua de azahar. Programar 3 minutos a 37 grados en velocidad 2. Cuando termine, poner en el vaso la mantequilla y la manteca y prograr 2 minutos a 37 grados en velocidad 2. Comprobar que la mantequilla y la manteca se han disuelto y si no es así dejar unos minutos más ya sin calor en velocidad 2 hasta que se disuelva. Con la máquina en velocidad 2, ir añadiendo uno a uno los huevos y las yemas hasta que estén integrados. A continuación, añadir la masa de arranque y mezclar en velocidad 4. Poner la harina en el vaso y por último la cucharadita de sal. Mezclar unos segundos en velocidad 6 y enseguida poner a amasar en velocidad espiga. Hay que ir mirando por si hiciera falta ir añadiendo mas harina. La masa tiene que despegarse de las paredes del vaso pero no debe quedar demasiado seca. En caso de duda es preferible que quede un poco blanda a que quede demasiado seca que eso tiene difícil arreglo. Si hay que añadir más harina hacerlo poco a poco, una cucharada cada vez, lo mismo si hubiera que añadir mas líquido (a temperatura ambiente). Con unos cinco minutos de amasado total es suficiente.

Primer levado de la masa:

Dejar la masa en el vaso tapado y abrigado para que leve. Tendrá que estar como mínimo 1 hora. En ese tiempo habrá doblado el volumen y la masa habrá levantado el cubilete. Si no es así, dejar más tiempo. Los tiempos son tiempos mínimos no pasa nada si está mas tiempo. Cuando ya haya levado por primera vez, sacar la masa del vaso sobre una superficie ligeramente enharinada. Amasar bien para desgasificar, golpear la masa y bolearla. En este punto, si la masa está bien hecha será una masa blanda pero no pegajosa. Si estuviera pegajosa ayudarse en el amasado con harina pero muy poca, la imprescindible para que no se pegue a la mesa o a las manos. En este amasado es muy útil tener un rascador o una pala de acero que permita despegar la masa de la mesada sin necesidad de poner más harina ya que con el amasado la masa se liga más y se hace mas manejable. Hacer una bola remetiendo la masa hacia el centro y así ya le vamos diciendo a la masa que queremos que siempre suba para arriba. Poner la bola de masa en un bol grande tapar con plástico y dejar levar a temperatura ambiente.

Segundo levado:

Dejar levar la masa hasta que doble el volumen. Tarda aproximadamente una hora. Los tiempos son tiempos mínimos no pasa nada si está mas tiempo. Una vez terminado el segundo levado, preparar la bandeja del horno con papel de horno o un silpat. Sacar la masa del bol, amasarla un poco y volver a formar una bola remetiendo para arriba. Poner la bola en la bandeja del horno y dejar reposar 10 minutos para que la masa se relaje. (La temperatura ideal de la masa es de 25 º aproximadamente. Si la masa está demasiado caliente estará pringosa y si está demasiado fría estará poco elástica). Con la bola de masa ya relajada en la bandeja del horno meter las manos en el centro de la bola e ir estirando desde el centro hacia los lados para formar el roscón del tamaño de la bandeja del horno. Hay que ir diciendo a la masa que queremos que suba hacia arriba y no se extienda hacia los lados así que iremos remetiendo la masa desde el centro y desde el exterior hacia dentro del roscón. Con la mano izquierda en el hueco del roscón y la derecha en la parte de fuera, ir remetiendo hacía dentro y dando forma a la vez. Es un poco difícil de explicar. Si la masa tiende a “cerrarse” hacía el centro o a encogerse, es que no está bien relajada, dejarla reposar otros diez minutos y se manejará mejor. Una vez formado el roscón, pintar con huevo batido y tapar con un film o plástico engrasado para que leve por tercera vez.

Tercer levado:

Tardará en doblar una hora mas o menos. Antes de que termine el tercer levado, precalentar el horno a 200º (arriba y abajo) y poner en la base del horno un recipiente pequeño apto para horno lleno de agua. Una vez terminado el tercer levado, volver a pintar con huevo batido (delicadamente para que no se baje) y adornar al gusto con frutas, almendras y azúcar remojado en agua. Poner en el horno, en la segunda ranura empezando por abajo, e inmediatamente bajar la temperatura a 180º. En 30 minutos estará hecho. Vigilad porque los hornos son diferentes y si veis que se tuesta demasiado tapar con papel de aluminio o bajad un poco el horno.

Lo podéis rellenar de nata, trufa, crema, mazapán o simplemente no rellenarlo. De todas las maneras está delicioso.